Quantcast
Channel: Blog de Gemma lienas » Libros
Viewing all articles
Browse latest Browse all 3

Entrevista a dDermis Magazine

$
0
0

Gemma Lienas (Barcelona, 1951) es una de las autoras más conocidas del panorama literario español y catalán. Escritora prolífica,  polifacética y siempre comprometida con la igualdad entre hombres y mujeres, ha publicado más de 70 libros para niños, jóvenes y  adultos, muchos de ellos galardonados, como “El diario violeta de Carlota” (Premio Unesco para la tolerancia) o “El final del juego”  (Premio Ramon Llull 2003). En 2010, recibió la medalla Francesc Macià al Treball por su papel en la literatura catalana y por su lucha  feminista.

¿Cómo salen las ideas para cada historia y personaje?

De todas partes. A veces se originan en un recuerdo, es el caso de “Callejón sin salida” (un recuerdo de mi época como profesora) o “Así es la  vida Carlota” (el recuerdo de cómo era yo a los 14 años); otras a partir de un tema que me interesa, como “Billete de ida y vuelta” (la  anorexia) o “El diario violeta de Carlota” (las desigualdades entre hombres y mujeres); a veces el origen es una conversación, así nació  la serie de “Emi y Max”, aventuras basadas en ciencia y sostenibilidad del planeta; también observar los problemas de mis nietos y nietas  me lleva a escribir unos cuentos de educación emocional, como “El hada menta”. En fin, las ideas están por todas partes, sólo hay que  prestarles atención.

Tus novelas para adolescentes tienen mucho éxito. ¿Crees que tu caso contribuye a desmentir el tópico de que los jóvenes  no leen? 

Mi experiencia personal desmentiría el tópico, claro. Muchos lectores y lectoras se ponen en contacto conmigo para comentar mis libros.  Creo que, en general, el mundo de la cultura está devaluado (por ejemplo, muchas familias se quejan si tienen que comprar novelas para  el curso escolar, pero compran a los jóvenes zapatillas deportivas carísimas y móviles de última generación). La culpa de ese desinterés por  la cultura y por los valores de la educación no es atribuible  a la juventud sino a los adultos, que les marcamos la pauta. Además, creo que  cada generación tiene valores interesantes, aunque seguro que ha perdido algunos que también lo eran.

Las nuevas generaciones han nacido con las nuevas tecnologías. ¿Cómo afecta eso a la literatura y cómo te estás  adaptando?

A mí, me encantan las nuevas tecnologías. A pesar de que sigo comprando libros de papel (en mi casa hay 10.000), tengo también un e-book y reconozco que es muy útil. Pienso que las nuevas tecnologías son interesantes porque permiten una mayor difusión de la literatura.  Lo único preocupante es la idea que se ha instalado en nuestra sociedad de que la cultura tiene que ser gratis. Gratis no hay nada, ni  siquiera la comida, el agua, la educación o la sanidad. Y quienes vivimos de la creación necesitamos poder continuar ganándonos la vida  con nuestro trabajo.

Madre de dos hijos y abuela de seis nietos… ¿Qué reflexión haces sobre la maternidad hoy en día?

La maternidad es complicada porque requiere tiempo. Y tiempo las mujeres tenemos poco. Creo que hasta que no se resuelva el problema  de la doble y agotadora jornada de las mujeres, la tasa de maternidad seguirá cayendo en nuestro país. Las mujeres se han formado y han  descubierto que entrar en el mercado laboral y recibir un salario les permite ser  independientes; luego, a eso no van a renunciar. Lo que  hay que resolver es el hecho de que los hombres todavía no se hayan incorporado de forma mayoritaria al reparto equitativo de las tareas  domésticas: trabajo de la casa, cuidado de la prole, de dependientes y de mayores.

Es sin duda un momento difícil en general, y en especial para el mundo de la cultura. ¿Cómo ves el futuro de la literatura  en 5-10 años? 

Ojalá tuviera una bola de cristal. Ahora mismo el panorama es negro para la gente que se dedica a la creación: los ingresos cada vez están  más mermados. Quienes se están haciendo de oro son Amazon o Spotify, por ejemplo.

Y hablando de futuro, ¿cuáles son tus nuevos proyectos?

Pues, precisamente porque no veo muy bien cuál será el futuro, me muevo en distintas direcciones: sigo escribiendo libros; me estoy  “inventando” una aplicación junto con un ilustrador y una informática; estoy colaborando con la industria de dibujos animados; junto  con una productora, estoy desarrollando un programa para una televisión; me planteo dar clases… Pero, por si todo esto falla, estoy  pensado en poner en marcha un negocio que no tenga nada que ver con la creación de historias.

Para  dDermis magazine


Viewing all articles
Browse latest Browse all 3

Trending Articles